son unos vendedores que han visto truncada su vida
profesional tras la irrupción del mundo digital. Intentando demostrar que no se
encuentran obsoletos, logran, contra todo pronóstico, el codiciado puesto de
becario en Google, conjuntamente con un batallón de brillantes estudiantes
universitarios. No obstante, conseguir ingresar en esa utopía sólo supone haber
ganado media batalla. Ahora deben competir con los expertos en tecnología más
importantes y competentes del país y corroborar que es cierto el dicho popular
de que “la necesidad es la madre de la (re)invención”.
Estos dos amigos habían dedicado su vida a perfeccionarse en
el arte de cerrar acuerdos comerciales, para, finalmente, ser despedidos.
Pertenecientes a una generación que creía que si trabajaba duro y seguía las
reglas, podría esperar ver cumplido el ansiado sueño americano, la vida útil de
Billy y Nick ha excedido su fecha de caducidad. O así lo parece.
Desmoralizados pero no rendidos, Billy y Nick descubren que
el secreto del éxito en esta nueva era se halla en la búsqueda. Es decir, el
motor de búsqueda conocido como Google; un lugar donde los sueños se convierten
en realidad.
Para lograr acceder a este mundo, Billy y Nick recurren a su
gran habilidad en el arte de la venta y se reinventan como becarios (o
Nooglers, en la jerga de Google). Rodeados de niños prodigio que tienen la
mitad de sus años, estos dos maestros de la persuasión tienen que encontrar la
forma de salvar esa brecha generacional o se arriesgan a perder la oportunidad
de pasar de Noogler a Googler (es decir, un auténtico empleado de Google a
tiempo completo). Billy y Nick, junto a sus jóvenes compañeros de trabajo,
descubren que la victoria se halla en las lecciones de la vida, que a veces
ganar no consiste en llegar el primero y que siempre tuvieron “Googliness”: el
deseo de seguir buscando…